“Cuando disparábamos a ISIS les hacíamos saber que éramos mujeres. Para ellos es la mayor deshonra"
Hablamos con Hanna Böhman, la canadiense que combatió a ISIS en Siria uniéndose a unas milicias kurdas
"Temednos a nosotras, vosotros enemigos de la humanidad porque moriréis en nuestras manos y arderéis para siempre en el infierno". Escrito en árabe y en kurdo, Hannah Böhman, 50 años, se tatuó la frase en el antebrazo cuando regresó de Siria.